lo pobre y lo tonto,
así que para disimular
lo auténtico da tranquilidad,
nada hay que esconder,
sin artilugios ni disfraces,
simplemente ser.
Nunca usar el "hubiera",
simplemente "me equivoqué"
y el precio que tuvo lo pagué.
Cuántas aguas turbulentas
en mi juventud navegué,
enfrente grandes tormentas
pero jamás naufragué.
Ahora pesco recuerdos
en un plácido río,
a veces suspiro, a veces lloro,
pero, afortunadamente,
al final siempre sonrío.
------------------------------------------------------------------------------------------------
No hay comentarios.:
Publicar un comentario