miércoles, 17 de junio de 2020

Sin título.


Las llamaradas del horizonte se encienden y el cielo se matiza con los colores de la pasión y así, como yo, va muriendo el día.

Nunca fui tibio ni frío para vivir ¿por qué habría de serlo a la hora de morir?

Vivir intensamente , morir de igual manera porque sé que la muerte no es la nada,
es tan sólo una transición pasajera que me llevará por otro camino a una nueva vida.

¿Cómo será? No lo sé y eso me entusiasma, nada más atractivo que lo desconocido.

Sin miedo cruzaré bajo el dintel porque sé que mi fe me dice que al final me encontraré con ÉL!

----------------------------------------------------------------------

1 comentario: