El camino se acorta.
Ha sido un sendero lleno de baches.
He caminado dando tumbos,
cayendo y levantando,
pero sin detenerme nunca.
Y aquí estoy todavía
siguiendo la luz de mi fantasía
que me da fuerzas para seguir aanzaando
¿Cuánto falta?
No lo sé ni me importa,
no me detendré.
Tal vez haya pausas, desacelere el paso,
pero no claudicaré.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario