Allá en mi muy lejana adolescencia había un señor que "trabajaba" dando 'toques' eléctricos y cuando caía la tarde se iba a la Plaza de Armas a descansar y echarse un cigarrito. Yo iba y me sentaba a su lado por su muy amena charla y un día me platicó:
-Venía a caballo 'ai' por el Móvano cuando me empezó a revolotear un 'arioplano' de los de Carranza, le clavé las espuelas al cuaco y me fui a todo galope, pero el avión daba la vuelta y el "chofer" sacaba la mano y aventaba plomazos con su pistola. Por fin 'vide`un árbol y ahí rayé al cuaco y me 'apié' con el lazo en la mano y cuando lo vide que regresaba al pasar por encima de mí le aventé una mangana y lo lacé de la cola y amarré la riata en el tronco y lo dejé volando como mayate a vuelta y vuelta hasta que se le acabó la gasolina.
Hacía una pausa y daba una fumada a su cigarro.
-Y lo mató?
-No! Lo dejé que acabara de vomitar por tanta vyelta que dio, lo amarré y me lo llevé preso al cuartel.
(¡¡¿¿??!!)
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario