En el siglo XIII hubo una banda de criminales a sueldo, esto fue en el Medio Oriente (Arabia) -.según el libro-. Para matar a alguien por el simple hecho de un pago, se requiere de algo más que el dinero y para ello, esos individuos fumaban el "hashish" -especie de mariguana- para tener el valor de ir y matar a alguien. Bien, si le quitamos la 'h' a la palabra hashish, nos queda asis, le agregamos el sufijo -ino y queda asisino y con el uso quedó en asesino.
El instrumento con el que cometían sus homicidios era una lezna -instrumento de talabartería parecido a un picahielo corto para perforar la baqueta y pasar el cáñamo-, atacaban a la víctima por la espalda tapándole la boca y clavándole la lezna en el oído y provocándole una muerte instantánea; ese instrumento, en latín, se llama 'sicari', de ahí el término sicario. Interesante, verdad?
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Gracias...¡muy informativo como siempre!
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