miércoles, 5 de septiembre de 2018

Toño Álvarez. (2001) 5-IX-18 Luis Azpe Pico.

Como una esfinge que siempre esconde su incógnita;
el libro convertido en hombre que todo lo sabe
y, a la vez, la libreta en blanco en donde anota lo que poco a poco va descubriendo.
Me parece un álamo que arrulla con el suave ronroneo de las hojas acariciadas por el viento.
'Arbol en el que se encuentra la frescura de su sombra y la paz que el espíritu necesita.
El silencio elocuente del que sabe escuchar y luego la palabra suave t atinada que siempre da en el blanco.
Una humildad que a veces me parece soberbia.
Paradójico, como todas las verdades, ahí está,
silencio elocuente, palabra callada,
fluye como un río subterráneo, no vemos el torrente pero sí el fruto que forma el bosque y la selva;
que mantiene la vida en el desierto.
Una activa tranquilidad que produce, siempre produce;
mueve a la acción con su aparente pasividad.
Silenciosa acción que invita a la imitación;
no sólo la palabra que convence con su verdad y elocuencia.
En fin, es, sencillamente, un maestro... y por encima de todo un amigo.
(Luis Azpe Pico VIII-2001)

----------------------------------------------------------------------------------------

1 comentario: